Desde la portada, el titulo, y la primera canción, Alejandro Sanz deja claro que este disco es más combativo que los anteriores y se aleja del reggeton y los dúos comerciales de los últimos años.
En cierta manera, regresa a sus orígenes y a lo que mejor sabe hacer: rock, medios tiempos y baladas italianas.
Centrándonos en las canciones, La Música No Se Toca es toda una declaración de intenciones, de lo mas rock que ha hecho en mucho tiempo, y una letra cierta como la vida misma.
Yo Te Traigo contiene una de las mejores interpretaciones del disco, recordando a Five Year de David Bowie. Sin duda, una de las sorpresas positivas del disco.
No Me Compares, por fortuna o desgracia, la hemos oído todos bastante. De las más comerciales, pero un tanto ingenua o facilona en su letra.
Llamando A La Mujer Acción baja el nivel respecto a las anteriores, pero Mi Marciana, lo sube rápidamente. De nuevo nos encontramos con una canción con aires renovadores a través de esos arreglos electrónicos.
Camino de Rosas recuerda quizás demasiado a La Parte De Delante de Andrés Calamaro, pero me gusta. Pegadiza.
Se Vende en sus diferentes partes recuerda a distintas canciones del disco No Es Lo Mismo (2003).
Como Andar Sin Ir Diciendo aportaría poco si no fuera por el melódico y armónico estribillo con los arreglos de viento, los cuales salvan la canción.
Camino A Casa, la voz añadida aporta poco a la canción. La interpretación sin embargo, una vez más, es destacable.
En Nena, Alejandro Sanz se mueve en el género que mejor sabe hacer: esa mezcla de balada trágica, combinación de interpretación contenida y desgarrada.
Bailo Con Vos es totalmente prescindible.
Cuando llevas más de diez canciones de un mismo artista, los temas tienen que tener algo especial para engancharte o al final terminas cayendo en la monotonía. Y esto sucede con Me Sumerjo. Sin ser mala, la canción está bien, a esta altura del disco, ya no aporta nada a la escucha.
Para Decirte Adiós corrige el error mencionado anteriormente y desde las primeras notas sabemos que estamos ante el cierre del disco. Una bella clausura para un buen disco con algún que otro altibajo, pero con un nivel de calidad bastante alto.
Sin duda, La Música No se Toca es el mejor disco de Alejandro Sanz desde No Es Lo Mismo (2003). Han pasado nueve años, pero lo que ha perdido en frescura, lo ha ganado en madurez.