martes, 28 de julio de 2009

Contra Crónica

A las 19:00 horas llegaba a mi casa. Entonces disponíamos de dos alternativas: O bien coger mi coche y tratar de aparcar lo mas cerca de Bastarreche, o coger el bus que no sabíamos dónde se cogía.
En cualquier caso, disponíamos de tiempo suficiente para una vez allí, inspeccionar la zona, tomarnos algo, y meternos a ver a Second.
Iba a ser un domingo de fiesta total, así que por un lado me molaba mas la opción del bus, para así poder beber sin preocuparme de tener que conducir a la vuelta.

Pero todo esto lo hablábamos el sábado, antes de salir esa noche. Cuando el domingo nos llamamos, los dos supimos que la fiesta iba a ser mucho mas light de lo que habíamos imaginado, al menos en el ámbito del alcohol. Y es que a partir de cierta edad, el cuerpo no lo asimila tan bien, o mejor dicho, no lo elimina tan bien, y todavía anda por las venas a modo de resaca.

Finalmente llegó algo mas tarde de las 19:00 horas y directamente rompimos el plan establecido y nos echamos el primer cubata en mi casa.
Después cogí el coche y aparcamos en el Zenit.
Cuando llegamos a la Plaza de Bastarreche parecía como si hubieran trasladado a Cartagena el Bando de la Huerta. Este ambiente en Cartagena no lo había visto en la vida.

Una vez dentro del recinto, fuimos directos a pillarnos unos minis de cerveza. Tuvo que decirme mi amiga que Second ya estaba actuando. ¿Qué hora era?
Nos acercamos un poco y grabé el vídeo de Todas Las Cosas.

Tras la despedida de Amaral, nos sentamos allí mismo donde estábamos, oyendo la música electrónica.
Ver todo el césped mas o menos despejado, con gente sentada en grupos, con el escenario al fondo, me hizo pensar que estaba en un festival de verano, pero en mi propia ciudad. Cartagena tenia por fin un festival. Me quedé en el césped disfrutando de esos momentos.

Entrada la noche, tuvimos que regresar a la realidad, y deshacer el camino andado para llegar hasta el coche. Y del coche a mi casa...

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